lunes, 31 de agosto de 2020

Hace 10 años...

 



FRANKLIN BRITO

Publicado en 31 agosto 2010 por Corresponsal


Ayer murió Franklin Brito. Dicen las noticias que pesaba 34 kilos. Medía 1,90 metros de estatura.

Tengo pocas referencias de él. Lo recuerdo de cuando se puso en huelga de hambre para reclamar derechos sobre unas tierras suyas en el estado Bolívar. Me impresionó de aquel momento su determinación. Entendí que daba el paso, persuadido de no tener ya otras opciones. Me llegó como alguien convencido de sus verdades y dispuesto a defender lo que consideraba sus derechos a costa de lo que fuese necesario.

Luego, escuché que había ganado y me alegré. Una funcionaria de alto nivel dio declaraciones en las que le pedía a Brito que depusiera la huelga y le reconocía sus reclamos, asegurando que sería resarcido.

Desde la postura de Brito, poco tiempo después, supe que no le cumplieron como él esperaba y que se disponía, sintiéndose defraudado, a reiniciar su protesta terrible. De nuevo a la huelga. Él esperaba, además de la reivindicación material sobre sus tierras, un reconocimiento de falta por parte del poder, una confirmación del abuso y una disculpa merecida, es decir, un resarcimiento moral. Esto no llegó y el hombre volvió a su lucha.

Aquí comenzó a interesarme más el discurso de Franklin. Escuché de nuevo su voz un tanto desgastada por los rigores de la mala nutrición, pero fortalecida por la convicción de quien se siente en lo justo. Le escuche solicitar pronunciamientos sobre la legitimidad de sus reclamos y la injusticia cometida en contra de él. Dijo estar dispuesto a morir si fuese necesario.

Dijeron que estaba loco, que no era responsable de sus actos y se lo llevaron por la fuerza a un hospital oficial, militar…

Le impusieron tratamientos que no quería. Se resistió. Lo aislaron hasta donde pudieron y le cerraron a sus familiares la información sobre su evolución. Él continuó su muda resistencia.

1,90, 34 kilos. Imposible resistir más.

¿Será que algún día sabremos quién responde por esta muerte tan absurda?